Según la Asociación Internacional del Cielo Oscuro, "A nivel mundial, gastamos al menos 50.000 millones de dólares en costes energéticos cada año para producir la luz que se escapa al espacio".
Esta luz no sólo se desperdicia, sino que puede contribuir negativamente a los entornos nocturnos, aumentar los costes innecesariamente para los propietarios de la iluminación, contaminar nuestros cielos oscuros y tiene el potencial de perjudicar el bienestar humano.
La tecnología NightTune de Thorn ha sido diseñada para limitar estas consecuencias adversas mediante la adaptación de las temperaturas de color y las salidas de luz a la hora de la noche y al entorno en el que se instala la tecnología.
En este artículo técnico, nos basamos en la investigación de expertos del sector, académicos y científicos y consideramos las oportunidades que puede ofrecer NightTune, con el apoyo de estudios de casos relevantes. También describimos los productos de exterior de la cartera de Thorn que han recibido el sello de aprobación de la Asociación Internacional de Cielo Oscuro, que los certifica como aptos para el cielo oscuro.